En anteriores artículos he mencionado que escribir libera. Pues bien daré un práctico ejemplo para explicar como funciona. Muchos habrán escuchado hablar de la caja negra de los aviones, es ese artefacto que contiene toda la información del vuelo, los anuncios hechos por el piloto y la tripulación, las fallas que pudieron ocasionarse, las conversaciones con la torre de control, todo esto para que en caso de un siniestro, tengan la información necesaria para determinar los hechos y las personas involucradas. El material de esta caja es muy fuerte, capaz de resistir el impacto del avión y solamente será abierta en caso de emergencia.
En los seres humanos pasa algo similar, el inconsciente es nuestra caja negra, allí guardamos todo lo que no utilizamos frecuentemente, lo que no nos gusta y lo que nos duele.
También encontramos ahí los miedos y las fobias. Es difícil acceder a esta información, en algunas oportunidades porque nos resistimos a hacerlo y en otras porque es doloroso recordarlo o molesto y cansado trabajar en ello. Están ahí y nos hacen daño, nos afecta el pensamiento y el comportamiento, son fantasmas que nos fastidian pero que no sabemos identificar bien. Cuando vamos a terapia, el psicólogo tiene los instrumentos necesarios para que proyectemos, algunas de esas pruebas que a veces nos parecen incomprensibles o extrañas, preguntas hechas de forma estratégica, dibujar o escribir, son la llave para acceder a esa caja negra, el inconsciente. Como podrán imaginarse, escribir es mi forma favorita para evocar, es el medio que he utilizado para convertir los miedos en dragones que son dominados por decididos príncipes y princesas, que no son más que la fuerza interior de cada persona. Sentarse en un lugar en calma, nos permite entrar en contacto con nosotros mismos, es manifestarle a nuestro inconsciente que estamos listos para entrar a recordar, reparar y poder seguir el camino. Tomar una hoja de papel en blanco y empezar a crear un mundo de posibilidades con maravillosos escenarios es abordar y tramitar los conflictos, es tomar las riendas de nuestra vida, rescribirla y propiciar el final que queramos. Tal vez han escuchado que las palabras tienen poder, pues bueno eso es cierto. También lo que pensamos, sentimos, hacemos y escribimos tiene el mismo efecto.Le damos poder a lo que somos, ponemos en marcha nuestros recursos y hacemos magia para resolver los problemas.
Una vez que escribimos ya no volveremos a ser los mismos, porque una vez que terminamos de escribir, nos damos cuenta que ya las dificultades no nos paralizan, las emociones se desbloquean, no tenemos que contenernos más y desatoramos el inconsciente, fluyendo hacia una sensación de paz y armonía, la verdadera catarsis. En Polper Psicología generamos unos espacios de Terapia Narrativa, para de una forma estructurada y dirigida, utilizar la escritura como un recurso para sanar. Ya puedes agendar tu cita.Sobre la Autora
CONSTANZA AIMOLA
Psicologa Clínica - Polper Psicología
Psicóloga egresada de la universidad Santo Tomás en Bogotá Colombia Cuenta con doce años de experiencia orientados con mayor énfasis en el contexto organizacional, aunque su formación es principalmente clínica A través de su experiencia ha utilizado la escritura narrativa como una oportunidad para hacer catarsis.